Bienvenidos a la gran ciudad, bienvenidos al maravilloso mundo de las obsesiones. La sociedad actual nos invita a nutrirnos de comportamientos en los que nuestras mentes se aferran a una idea fija e incontrolable. Cada vez son menos las personas que pueden escapar de esta espiral psicológica en la que se proyectan las relaciones humanas, la salud y la alimentación, el dinero y la imagen, el orden y la higiene…